Gozamos la dicha de nacer en un país, donde vivimos de forma libre e independiente. Los costarricenses, los de hoy, tenemos el privilegio de gozar de libertades y privilegios por los que otros lucharon en el pasado.
Debemos disfrutar y agradecer nuestra propia experiencia como costarricenses. También, es natural que nos surja la siguiente pregunta:
¿Cómo costarricenses, ¿cuál es nuestro aporte para las generaciones futuras?
Si nuestros antepasados (costarricenses, centroamericanos, y todos los del resto del mundo que les inspiraron) hicieron lo necesario para que hoy todos gocemos de una vida libre e independiente, ¿cuál es el cambio que nosotros, los de hoy, dejaremos a nuestros hijos y generaciones futuras?
Nosotros lo tenemos claro, queremos independizarnos de la normalidad de consumir alimentos cargados de tóxicos, de una naturaleza en agonía por la actividad agrícola e industrial, y de un sistema alimentario que limita para unos pocos el acceso a los alimentos más saludables.
Nuestro grito de independencia es una nueva forma de producir, distribuir y consumir alimentos, cuya producción regenere el ambiente, beneficie la salud del consumidor y promueva el desarrollo humano para el país.
Queda en la libertad de cada consumidor, elegir lo que consume y el futuro que desea para el país y para el mundo. Nuestro trabajo está en crear y promover una nueva y mejor alternativa, un nuevo sistema alimentario, una nueva comunidad de productores y creadores, unidos por ideales como la salud, la sostenibilidad y la conveniencia.
Y usted, ¿se nos une?
Haga su pedido de alimentos orgánicos y libres de pesticidas y recíbalos en su casa. 🙂